La internacionalización de una empresa es un proceso extremadamente delicado. El marketing representa la herramienta más directa para hacerse conocer en el menor tiempo posible. Los anuncios promocionales, los mensajes publicitarios, la información comercial e institucional que se presentan en un panorama internacional, deben responder a las exigencias específicas del país de destino, no solo desde el punto de vista lingüístico, cultural, de reglas y normas, sino también teniendo en cuenta las distintas formas de comunicación.